EL JUEVES 18 DE NOVIEMBRE, TODAVÍA CON MÁS RAZÓN, PARO PARCIAL EN TODO EL ESTADO CONTRA LA LEY POSTAL Y EL BLOQUEO DE LA NEGOCIACIÓN COLECTIVA
Urge dar una respuesta a la situación que estamos sufriendo. La ley Postal ha sido aprobada en la Comisión de Fomento del Congreso con los votos a favor del PSOE y los grupos nacionalistas y la abstención del PP.
La alianza del PSOE con la derecha parlamentaria ha supuesto empeorar el proyecto de ley, cediendo a las presiones y exigencias de los operadores privados.
Las principales modificaciones son las siguientes:
• Art. 14: se añade un nuevo párrafo que habilita legalmente a los operadores privados para admitir solicitudes, escritos y comunicaciones a los órganos de las administraciones públicas. Hasta ahora, sólo Correos podíamos hacerlo.
• Art. 22: se añade un nuevo párrafo que permite al resto de operadores la práctica de notificaciones de órganos administrativos y judiciales. Por fin los privados han logrado lo que querían: entrar a saco en un segmento hasta ahora reservado a Correos.
• Art. 31: se rebaja la contribución postal del 1,5 al 0,5 % del importe neto de la cifra de negocio de servicios postales incluidos en el SPU para los operadores que superen los 50.000 € anuales y se obliga también a Correos a su pago (los privados pagan menos y más déficit para Correos).
• Art. 33: se suprime el 2 % de recargo en las tarifas (la única modificación decente).
• Art. 45: Correos deberá tratar a sus filiales o empresas participadas como a cualquier otro operador en cuanto al acceso a la red postal.
• Art. 46: se introduce una de las grandes reivindicaciones de los operadores privados: la ponderación del “coste evitado” a la hora del cálculo de las tarifas para el acceso a la red, es decir, a más bajo precio.
• Art. 51: se da sillón a los sindicatos “más representativos” de ámbito autonómico en el Consejo Superior Postal (por su parte, el PNV se aseguró su inclusión en la Comisión Nacional del Sector Postal en el pacto de los Presupuestos Generales con el PSOE).
• Diposición Final 1ª: se rebaja la tasa anual que deben pagar los operadores para financiar la Comisión Nacional del Sector Postal de 500 a 400 €. Vamos, que no se han cortado ni con la calderilla...
A estas modificaciones hay que sumar lo que ya hemos explicado: que el proyecto de Ley Postal no garantiza la financiación del Servicio Postal Universal (SPU) ya que el gobierno no se compromete; que define un SPU por debajo de los mínimos establecidos en la Directiva europea; que permite un acceso a la red postal de la empresas privadas abusivo que las hará más competitivas a costa nuestra; que no regula condiciones laborales y salariales mínimas en el sector...
Ahora, el proyecto de Ley Postal ha pasado al Senado, donde aún puede ser enmendada. De ahí la importancia de que las movilizaciones que convocamos cuenten con el apoyo masivo de los trabajadores y trabajadoras de Correos.
Como era de prever, los grupos políticos y, sobre todo, los intereses que representan se están repartiendo el pastel postal. Desde el PSOE hasta el PP se han puesto de acuerdo para que el mercado postal pase a manos del sector privado, dejando lo público, poco a poco, a un nivel marginal.
En este empeño han encontrado la colaboración de los grupos nacionalistas. El interés de CiU y PNV bien pudiera estar en la posibilidad, que contempla la ley, de fragmentar la prestación del Servicio Postal Universal por zonas, aspirando a que dicha prestación recaiga sobre empresas privadas de su cuerda en sus respectivas comunidades autónomas (dejando en la estacada al personal de Correos, ya que no estaríamos hablando de transferencias sino de distintos operadores).
La abstención del PP, que no el voto en contra, refleja el asentimiento de la derecha neoliberal con la ley. Satisface sus expectativas de entregar el sector postal a la iniciativa privada.
Pero tenemos más problemas. La negociación colectiva está bloqueada. Las propuestas que hasta ahora ha presentado la empresa son infumables. Nada de dinero, a pesar de que una parte de la plantilla no cobra los tramos y a pesar de que a la otra parte nos han bajado el salario en un 5%. Quiere más movilidad funcional, vincular los días de asuntos propios y los tramos al absentismo...
¿Y los sindicatos?
UGT, como era de esperar, no se mueve contra el PSOE. Es un sindicato de partido y está jugando su papel, contener las posibles movilizaciones del personal de Correos contra la Ley Postal del PSOE.
Pero, ¿qué pintan ELA y LAB en todo esto? Que con la modificación del art. 51 les den sillón en el Consejo Superior Postal no parece suficiente razón. No discutimos el derecho o no derecho a que estén ni decimos que sea la contrapartida por su acompañamiento a la Ley Postal, pero, desde luego, no es la mejor imagen en estos momentos.
Lo que sí es una contradicción enorme es que ELA y LAB lancen a los cuatro vientos proclamas para “que la crisis la pague el capital”, que convoquen 7 días de huelga en el metal de Gipuzkoa para defender salarios y jornada o que saquen carteles denunciando la pérdida de 3.300 empleos públicos en la Comunidad Autónoma del País Vasco, y sin embargo, en Correos, con discriminaciones salariales, bajadas de sueldo, bloqueo de la negociación colectiva, pérdida de 7.000 puestos de trabajo y con una reconversión del sector en puertas que nos va a afectar gravemente, no hagan nada. Absolutamente nada.
No sirve escudarse en lo que en el pasado firmaron CCOO y CSIF (y antes UGT y hasta ELA) para justificarse ante el colectivo. La realidad es que ni UGT, ni ELA, ni LAB están dispuestas a enfrentarse a la Ley Postal, a la pérdida de empleo, salarios y derechos y al bloqueo de la negociación colectiva.
Y esto es lo que tienen que explicar al colectivo. Por qué en Correos no hacen nada, por qué no salen de los despachos, por qué no movilizan.
Con la que está cayendo (reforma laboral y de las pensiones y recortes por todos lados que nos hacen pagar la crisis) va a resultar que Correos es el mundo de yupi donde el PSOE está haciendo la única política progresista... con la derecha nacionalista y el beneplácito del PP. ¡Venga ya!
Es hora de hablar claro: o se está en la defensa de los intereses colectivos de Correos o se está en la defensa de otros intereses.
Y la defensa de los intereses colectivos de Correos pasa, ahora más que nunca y con más razones que nunca, por la movilización. La pasividad nos lleva a u futuro muy negro. Da igual qué sindicatos estén o cuáles no. Es el colectivo quien debe movilizarse. Es el colectivo el que debe dar una lección en estos momentos.
Los operadores privados han hecho su labor y están sacando tajada. Los trabajadores y trabajadoras de Correos debemos hacer la nuestra en defensa del correo público, de nuestros salarios, de nuestras condiciones laborales, del empleo y de nuestro futuro.
Por eso, el jueves 18 la respuesta ha de ser masiva en todo el estado, al paro de tres horas y a las movilizaciones. Por eso te llamamos a sumarte a la movilización.
JUEVES 18 DE NOVIEMBRE – PARO DE 3 HORAS
CONCENTRACIONES:
BILBAO: 12,30 EN URQUIJO
DONOSTIA: 13,00 EN URDANETA
GASTEIZ: 12,30 EN POSTAS
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